Hay dos tipos de prótesis, las fijas sobre dientes o sobre implantes que no podemos retirar de la noca u las prótesis removibles, completas o parciales, y férulas que podemos limpiar fuera de boca.
Para limpiar las prótesis fijas a parte de la utilización de un cepillo de dureza media es esencial el uso de cepillos interproximales o el uso de una seda dental gruesa que permita realizar la higiene de los puentes o espacios anchos. El irrigador dental también puede ayudar a eliminar restos de alimentos. En el caso de implantes se recomienda acudir a revisiones periódicas al menos una vez al año.
Para la limpieza de las prótesis removibles debemos cepillarlas diariamente con agua y jabón o con pastillas limpiadoras y quitarlas por la noche para dormir (exceptuando férulas de retención o de descarga). Los adhesivos deben eliminarse completamente de la prótesis cada día.