Las manchas en los dientes se conocen con el nombre de tinciones y pueden tener mayor o menor intensidad. Se deben a muchas causas que pueden ser extrínsecas (aquellas que se producen sobre la superficie externa de los dientes) o, por el contrario, pueden ser intrínsecas (producirse en la propia estructura interna del diente).
– Origen bacteriano. Algunas bacterias producen agentes cromáticos que tiñen los dientes.
– Medicamentos. El hierro administrado en algunos tipos de anemias tiñe los dientes.
– Tabaco y alcohol. La nicotina y otras sustancias del tabaco, así como el tanino del vino, tiñen los dientes.
– Edad. Es normal y fisiológico que con la edad, los dientes se vuelvan más amarillentos.
– Determinados alimentos. Como el té, el café, los frutos rojos o la remolacha, provocan tinciones dentales.
– Traumatismos. Como consecuencia de traumatismos dentales, la pulpa del diente (el nervio) se ve afectada y el diente se oscurece.
– Fluorosis dental. El flúor coma a concentraciones no adecuadas y no supervisadas por el dentista, produce tinción dentaria.
– Causas genéticas. Determinadas tinciones tienen un origen genético.