Los implantes dentales representan posiblemente la mejor solución a la pérdida de los dientes naturales. En ausencia de dientes propios, la colocación de nuevas raíces dentales (los implantes) en el maxilar es la manera más natural, fiable, cómoda y estética de volver a disfrutar de una prótesis fija.

Mantenimiento y seguimiento: Una vez llevado a cabo el tratamiento implantológico-protésico, el paciente debe realizar un programa de mantenimiento y seguimiento para asegurar el éxito de este tratamiento: conservar el implante de por vida.

 – Una cita periódica (semestral o anual) con su odontólogo para:

             > Realizar una radiografía que muestre el estado óseo alrededor del implante.

             > Eliminación de la placa dental acumulada (biofilm oral).

             > Revisión de la oclusión.

             > Revisión de los tejidos alrededor de los implantes y prótesis.

– Una higiene oral correcta diaria en su domicilio para controlar la placa dental (biofilm oral). La prevención mediante una buena higiene bucodental es fundamental para evitar la aparición de mucositis y periimplantitis. Para ello debemos utilizar:

             > Cepillos interproximales.

             > Seda/cinta dental.

             >Irrigadores bucales.